
Ganado ovino.
Ganado ovino.
Según los últimos datos de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, actualmente hay detectados 231 focos del serotipo 4 de la lengua azul y 3 del serotipo 1 en toda la geografía española. Así, y según la Orden AAA/2029/2014, de 29 de octubre por la que se establecen medidas específicas de protección en relación con la lengua azul, actualizada a 7 de noviembre, el Magrama ha ampliado a nuevas comarcas de Cáceres y Badajoz las zonas de restricción para los serotipos 1 y 4 del virus de la lengua azul.
Según el último informe de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria, la constatación de la recirculación del serotipo 1 y 4 fuera de los límites de la zona de vacunación obligatoria ha conllevado el reforzamiento de las medidas de prevención, vigilancia y control en ambas zonas.
Así, las zonas restringidas frente a los serotipos 1 y 4 del virus de la lengua azul se amplian y en Extremadura son: en la provincia de Badajoz las comarcas de Don Benito, Castuera, Herrera del Duque, Azuaga, Zafra y Mérida. En la provincia de Cáceres, las comarcas de Logrosán (Zorita) y Trujillo.
En Castilla-La Mancha, se encuentran en restricción en la provincia de Ciudad Real las comarcas de Almadén, Almodóvar del Campo y Piedrabuena (antiguas comarcas de Piedrabuena y Horcajo de los Montes).
Y en la Comunidad Autónoma de Andalucía, las provincias de Huelva, Sevilla, Cádiz, Málaga y Córdoba. Y en la provincia de Jaén, las comarcas de Jaén, Linares y Andújar.
Según el informe del Rasve, desde el 22 de septiembre al 3 de noviembre, hay declarados 231 focos del serotipo 4 de lengua azul en España, de los que 109 están localizados en Córdoba, 53 en Ciudad Real, 35 en Sevilla, 24 en Badajoz, ocho en Jaén y dos en Cádiz.
Se han descrito 24 serotipos diferentes del virus de la lengua azul, aunque en Europa sólo se han detectado algunos de ellos hasta el momento (1, 2, 4, 8, 9, 16). En los últimos años, en Andalucía se han detectado brotes del serotipo 1, 8 y 4. La virulencia del virus varía considerablemente entre las distintas cepas, siendo el serotipo 1, el más virulento, y no se transmite por contacto directo o indirecto entre animales, sino a través de mosquitos de la especie Culicoides, que son los vectores biológicos, si bien no todas las especies de Culicoides resultan vectores eficientes de la enfermedad.